A eso me refiero. Eso y nada más. Malévolas y para nada inocentes ideas de romper con lo cotidiano; lo ,por norma, querido y deseado. Las ganas de romper esquemas. Frenética e impulsivamente machacar todas y cada una de las cosas impuestas. Que me llamen loca estos mortales, no me importa, me lo habré ganado. Si despiertan ternura, mejor. Quiero hacerles entender que viven por encima de sus posibilidades, que este mundo no ha sido hecho por ellos, si no para ellos y otros cientos. Quiero hacerles temblar, que sientan el peso de sus actos y sepan que no están solos, nosotros les observamos. Seguid así, ya veré